Bogotá, 22 de mayo de 2025
Aunque me referiré un poco a este tema del control, creo que mis circunstancias obedecen más a dar una explicación general de lo que empieza, de lo que ya se produjo y de lo que empieza a producirse a partir de la aprobación del acto legislativo, que en concurso entre el Gobierno Nacional, yo le di mi apoyo, no todo el Gobierno estaba de acuerdo, y sectores mayoritarios del Congreso que provienen precisamente de las regiones, pues se hizo, logró su concertación debida y se aprobó, y es un hecho ya. El acto legislativo da paso a la ley famosa, es uno de los debates más interesantes del Congreso que yo he vivido, más o menos unas dos o tres veces he estado en esos debates, porque ni más ni menos tienen que ver con la configuración del poder en Colombia. Por esto se han matado los colombianos entre sí, como cosa rara.
Muchas guerras civiles hubo sobre si el país era centralista o descentralista, así apareció la Patria Boba, yo creo que la Patria Boba no se ha acabado, sigue igual, y la describe muy bien Cien Años de Soledad, por eso digo que hay que terminar con los cien años de soledad, y el último Aureliano debe dejar escritas sus últimas palabras, y no deben haber más Aurelianos en Colombia.
Por tanto, la importancia del debate no es cualquiera, si por eso nos hemos matado en el siglo XIX, en el siglo XX, en el XXI también, entonces este es un debate que pacíficamente, lo más ampliamente posible, consultando las regiones, los pueblos de las regiones, porque en la región hay una sustitución del poder real, y dejando que el Congreso tramite el proyecto, que yo pienso que se debe tramitar en este Gobierno, que le dé paso a la reglamentación de un salto en general de recursos públicos que van al municipio.
Nace el poder local
La Constitución del 91 no fue favorable a los departamentos, se nos ha olvidado eso, por un voto creo, ya no recuerdo bien, incluso hubo una proposición de que no existieran más los departamentos. Se pensaba más en un modelo institucional de municipio fuerte, la tendencia municipalista en Colombia es desde la República, desde antes de la República, desde la Colonia, porque sigue también una tendencia municipalista española, y también un instinto confederacional de los pueblos indígenas que habían antes, que nunca crearon imperios como en otras partes de América, sino que crearon confederaciones muy horizontales, muy interesantes desde ese punto de vista, que estaban determinadas un poco por la geografía.
Los caribes entraron por el río Magdalena hasta lo más profundo de Colombia, es posible, porque los Mayas, en mi opinión, eran caribes, quizás la cultura más avanzada de los pueblos caribes, es posible que entraran por el río Magdalena aguas arriba y llegaran hasta San Agustín, pero estos son tesis que ya les corresponde a otras ramas científicas estudiarlas más a profundidad.
Y los muiscas se fueron yendo por las alturas de las montañas, pueblos andinos, pueblos marítimos, los otros, diferencias que ya existían, diversidad entre los pueblos indígenas, y esto ya iba marcando pues la historia que hoy tenemos. Los españoles no eran ajenos al problema en su propia España, una guerra civil les costó un millón de muertos, y quizás uno de los grandes atrasos de la humanidad al vencer el dictador.
Las ideas republicanas españolas son como una extensión, ellos no lo dicen así, pero yo sí, es como si Bolívar hubiera galopado por el Caribe, por el Atlántico, y se hubiera metido en España misma, y hubiera levantado la bandera de la República en España misma, y eso es un episodio de la historia profundo, intenso, dramático, porque al perder la República, perdió la humanidad.
Se dio el fascismo con toda su virulencia y dejó 50 millones de muertos en toda Europa. Bueno, pero este tema implica que en España existía de tiempo atrás una tendencia muy fuerte hacia el poder local, la comuna, la comunidad o el municipio, y eso también lo heredamos.
Poder constituyente y constituido
Y conjuntamente, pues lo que tenemos es una realidad que hay que comprender institucionalmente. No son las sociedades que se adaptan a las instituciones, error antidemocrático y autoritario del que nos ha plagado buena parte el pensamiento, diría, anacrónico, antidemocrático de Colombia. Son las instituciones las que se adaptan a la sociedad, para que puedan ser legítimas y eficaces.
Hemos creído, como los monarcas, que las instituciones son jefaturas sobre la sociedad, y el discurso aquel de que por encima las instituciones y tal de la sociedad, es un discurso profundamente antidemocrático. Las instituciones obedecen a la sociedad, no más. Son poderes constituidos, el presidente es un poder constituido, el poder soberano, como dice la Constitución del 91, es el pueblo, y el pueblo es el poder constituyente. Y este cambio de la jerarquización de la sociedad tiene que ser claro en una sociedad democrática. No nos gobiernan reyes, reyezuelos, tiranuelos, mafias. Nos gobierna el pueblo.
Si eso no es así, no es el pueblo el que tiene que corregirse, son las instituciones las que tienen que corregirse o serán avasalladas por la historia. En buena parte la historia de Colombia tiene que ver con eso, con instituciones que se crean con una mentalidad diferente al querer democrático y al principio fundacional de esta República, que no es más que la libertad. Oliver (Cromwell, líder político y militar inglés) planteó la libertad como bandera. Esta república se creó fue para hacer la libertad, no para hacer otra monarquía. Cuando le ofrecieron a Bolívar, ya también es tema de otros análisis históricos, la monarquía, la corona, no hizo lo de Napoleón, no la quiso. Y como (Giuseppe) Garibaldi (líder político y militar italiano) se alejó del poder.
Hay otras que lo que quería era dirigir la insurrección de Riohacha en aquel entonces, y por eso pasó por Santa Marta, en un conflicto colombo-venezolano que destruía ya la Gran Colombia, para desde ahí refundar la Gran Colombia. Bueno, pero estos son temas de la historia. Lo cierto es que quienes hemos, y a mí me ha tocado en mi vida, casi desde joven, de niño casi, recorrer el país de verdad, a pie. Por eso mis zapatos no son tanto los Ferragamo, que tanto me critican, sino mis botas. Pero esas no las muestran, no les gusta el presidente en botas. Pero yo he andado en botas casi toda mi existencia.
Me ha tocado, y las botas son, de nuevo, las botas son para poder correr rápido y no troncharse el tobillo, o para andar por los charcos, el barro, si uno no conoce el barro de Colombia, no conoce a Colombia. Por eso tanto político ahí, (Álvaro) Uribe les llamaba perfumados, como era, en eso tenía razón, que no saben que es Colombia, no saben que es Bogotá, metidos en una burbuja maiamiense, en un lugar geográfico de las ciudades más grandes de Colombia, del cual no salen, con medios de comunicación que vienen exclusivamente en esos lugares, entonces tampoco conocen a Colombia.
Y lo sorprende Colombia, porque obviamente hay un país ahí, lo sorprende. Los que hemos tenido la oportunidad de recorrerlo, que no solamente es su geografía diversa, saber tocar el barro, pisarlo, y no tener miedo a meterse en la humedad, o en sus páramos, o en sus playas, etcétera, conocemos a la gente también. La gente son diversas, indudablemente.
Libertad, derecho universal
Esto ya es una frase en cajón, pero la diversidad cultural colombiana es tan grande que, considerada como un problema, y de intentos homogenizadores de la sociedad, que no son más que fascistas. Un ser humano tiene que ser como yo pienso, punto. Se uniforma, se marcha igual, piensa igual, pensamiento único. Pues la sociedad colombiana no tiene nada que ver con eso. Jamás va a marchar con un solo paso, ni bajo una orden. En eso se han equivocado las tendencias más autoritarias del país. Chocan una y otra vez, y el pueblo se los demuestra. El pueblo lo que quiere es libertad. Nació en esa idea.
Y esa idea es instintiva, prácticamente. No es que sea una gran construcción ideológica, teórica, sistemática del concepto de libertad. Difícil de hacer. Yo solo recojo las palabras de (Georg Wilhelm Friedrich George Wilhelm Friedric) Hegel (filósofo alemán), que decía que la libertad es la superación de la necesidad. Obviamente no es el concepto de Milei, y de otros que le siguen, que la libertad es poder ir a un supermercado y comprar lo que se le dé la gana. Pero para poder ir a un supermercado y comprar lo que se le dé la gana a uno, pues tiene que tener plata. Entonces la libertad solo es para los que tienen plata. Eso significa que no es libertad. La libertad es un derecho universal.
Y por tanto no es más sino una usurpación del término que las extremas derechas hoy hacen, pensando que libertad es una palabra mercantil, y libertad es una palabra de la esencia humana. El individuo se convierte en persona porque es libre. Y la humanidad libre está compuesta no de individuos sino de personas. Por eso tanto intento de quitarle la identidad a la persona para ponerle un número tatuado en el brazo. Bien, al tema.
¿Qué es el desarrollo?
La institucionalidad colombiana por tanto debe plegarse a la realidad diversa de Colombia. Reconocerla. Y ojalá hacerla florecer. Es nuestra riqueza, no nuestro problema. El desarrollo, en este sentido, no es como pensaban los economistas norteamericanos en los años 60. Un desarrollo impuesto, un desarrollo es esto, esto y esto, como fue en Estados Unidos, luego aquí tienen que hacer esto, esto y esto igual, y entonces ustedes se desarrollan. Fracasamos imitando.
Desarrollo no es eso, desarrollo es más el concepto de la adolescencia del ser humano. Las fuerzas internas están y de pronto florecen y desarrollarse es florecer desde el interior, mujer, hombre. Los hombres también florecemos, a veces. Si no, nos dejamos florecer porque si no nos pasa lo de La Vorágine.
Y el desarrollo por tanto es el concepto de la potencialidad cultural de la sociedad dejándose expresar para florecer. Si le impides expresarse, matas la sociedad. Por eso los debates actuales son tan importantes. Una institución diciendo que se deja de expresar a la sociedad, que se le impide, institución que la va a barrer la historia. Ahí no hay nada que hacer. No lo digo yo ni el Gobierno, lo barrerá la historia.
Descentralización y democratización
Y ahí, en este caso de la descentralización, entonces digamos que hay un avance en el sentido de que la institucionalidad que tiene que ver con las reformas reconoce esa diversidad. Puede tener finalidades diferentes y he ahí los peligros que ya mencionó el Contralor. Descentralización no necesariamente es democratización. Y algunas cifras del Contralor pues me gustaría discutirlas. Aumentamos nuestros servicios de salud al 80%, 90% más o menos. Los servicios o el carnet. Es diferente. Entonces, si el indicador lo hacemos por carnetizados, pues si nos va un 90%, 95%. Pero si vamos al territorio del que hablamos, el municipio, la red de servicios de salud de los municipios, la mayor parte de los municipios de Colombia, es pública. Y al ser pública no es cuidada por las EPS, que cuidan es las clínicas del propietario de la EPS.
Por eso hay viajes desde Riohacha hasta Bogotá, con familiares incluidos, no porque en Riohacha no se puede hacer el servicio, sino porque la clínica del dueño de la EPS está en Bogotá. Y ahí se va el dinero público. Dinero público que, como lo ha demostrado la misma Contraloría, no son solo cifras lo muestran: En el Fomag (fondo de salud del magisterio), en las regalías, en las carreteras por concesión, y en la salud, y puntos suspensivos, se han perdido decenas de billones de pesos robados y derrochados. Un país con carencias no se puede dar ese lugar. Derrochados completamente.
Corrupción nacional vs. corrupción local
En unos casos robados, que ya es otro tema que merece investigación, por la competencia de las autoridades competentes que deberían hacerla. Hay un problema en la corrupción en Colombia, y es que si es local es denunciada por la prensa y castigada. Si es nacional es encubierta, incluso por la prensa misma, porque la nacional es bogotana, antioqueña de El Poblado, algo caleño, algo.
De ahí para allá todos los que la salgan por ahí lo cogen en preso y lo meten en preso. Y lo descuartizan en la prensa. Pero si es en estos otros lugares no hay tal. No hay tal. Porque son los dueños verdaderos del poder. La corrupción nacional, le pongo esa entre comillas, porque en realidad es bogotana y de El Poblado y medio caleña, en una parte. No es nacional, por tanto, es de los centros regionales de poder. Esa corrupción es más grande, muchísimo más grande que la corrupción local.
Por eso parte del debate de que no se debe descentralizar porque hay corrupción, que es cierto, en el municipio. Es falso, porque nacionalmente la tecnocracia nacional es funcional a grandes eventos de corrupción en Colombia. Lo que he descubierto algunos, usan el software. Un alcalde municipal no creo que lo logre. Pero aquí es por software, algoritmos, caballeros y damas, previamente manipulados para que el dinero automáticamente, sin que nadie se dé cuenta, el dinero público vaya al arca privado.
Por eso hay un, no quiero explicar las razones del déficit porque son varias, pero por eso hay un déficit fiscal en Colombia. Y otras razones, ahora hablaré de algunas. No es concebible que la plata que se les paga a los concesionarios de vías 4G, 5G, vaya a los bancos de los propietarios de las concesionarias. Y entonces no estamos pagando obras, estamos pagando una renta.
Y se acumula ahí el dinero público sin volverse obra. Y nosotros vamos aquí recortando gastos porque no tenemos plata para sostener el Estado. Viendo si se le sube o no el sueldo a los soldados o a las enfermeras. Entonces, si los soldados, los maestros, las enfermeras y médicos no tienen mejor sueldo, entonces ¿qué? ¿Cuál es la función del Estado? ¿Cuál? Escribir, hacer debates o ¿cuál? Porque la función esencial del Estado es cuidar la vida humana.
Y si el dinero no da para cuidar la vida humana porque lo estamos guardando torpemente en las arcas de los bancos de los dueños de las concesionarias, esto no tiene sentido. ¿Y por qué se hace? Por Ley.
Y no se modifica la Ley porque la ley fue hecha por los concesionarios de las vías. No por el pueblo de Colombia. A través de sus mecanismos de financiación, etcétera, y de lobby, etcétera. Tiene toda una tecnología. Pero es más poderoso el lobby de los dueños de las concesionarias viales que el lobby del pueblo. En una democracia no podría ser así.
Pero ya vieron qué pasó con el lobby del pueblo. Y en cambio el lobby de los banqueros va derechito y sale derechito. Luego la corrupción no es el tema para diluir el debate de la descentralización. Es un peligro en todas partes. Y aquí vamos hacia el control. Si descentralizar no es democratizar, nosotros lo que queremos es descentralizar y democratizar.
Descentralizar el presupuesto local
¿Esto qué significa? Que, si se descentraliza el presupuesto en un municipio, aumenta su presupuesto. O a través de la ley 30 de la autonomía universitaria que nosotros apoyamos de la constituyente. Y yo estoy que pienso y pienso, porque el resultado final es que la universidad pública queda en manos de la mafia.
Si la universidad pública queda en manos de la mafia, ¿qué pasa con una sociedad? Su futuro. ¿Qué pasa con muchachos que no aprenden todavía las ABC de su carrera, y ya aprenden, a cambio, de un dinero a apoyar al candidato mafioso del lugar para ser rector de la universidad pública? ¿Vamos a tener futuro? Y en donde debería brillar más el pensamiento y la libertad, entonces brilla la mafia.
Y hasta muertos hay por esos hechos. Hay algo que nos está fallando indudablemente y así pasa también en muchos municipios. El poder local es más cooptable que el poder nacional. Ambos son cooptables. Pero es más fácil ahí porque las armas están ahí. Concejal le llegan y ponen un revólver en la mesa. Y el alcalde ni se diga porque tiene los hijos ahí. Y muchos además pues les gusta el billetico. Y hay mucho billete porque son los negocios ilícitos.
Y entonces ya no tenemos una violencia, que es insurgencia contra el Estado. La violencia ya nace ahí. No hay insurgencia. Alguien diría tampoco hay Estado. No, lo que hay es una guerra por los negocios ilícitos de las regiones que entonces han cambiado su geografía. Por eso la violencia cambia la geografía. Se desplaza hacia los puertos, controla los puertos.
Corrupción en los puertos
El caso de Barranquilla es dantesco. El caso de Barranquilla hay que estudiarlo a fondo. Yo he propuesto hablar con las bandas de jóvenes. Voy a ver si sale. Por eso es controlable, es visible, hay que verlo. Si funciona o no funciona. No me amarro ahí a un dogma. Pero yo creo que hay que desactivar la violencia en Barranquilla que además es similar a los puertos.
¿Por qué los puertos? Por obvia razón. Por ahí sale la cocaína y entran las armas y el contrabando. Entonces, controlar el puerto es esencial para las mafias de estos negocios ilícitos. Y entonces esa violencia coopta el poder regional, el poder municipal pone la política al servicio de sus intereses. Y ahí, pues ese ha sido un debate mío, incluso 35% del Senado fue a la cárcel después que empezamos los debates de la parapolítica.
Cuando uno se pone a pensar aquí, ya lejos de ese tiempo, llevar a la cárcel el 35% del Senado, que no fui yo, obviamente, yo empecé el tema, armé el avispero. Fue la Corte Suprema de Justicia de ese entonces, porque esa Corte la censuraron con el 'cartel de la toga' para que no siguiera las investigaciones. Ciertos políticos grandes de Colombia que estaban temerosos de que siguieran las investigaciones.
El poder de la ciudadanía
Lo que vimos entonces era una clara tendencia de cooptación del territorio, no es el pueblo el que decide en el municipio, es la mafia. Y si el pueblo lo intenta, matan y masivamente generan genocidios. Por tanto, aquí hay un riesgo real de lo que estamos pretendiendo hacer, que no va a depender sino de todos los años que están por venir y del poder que tenga la ciudadanía.
Entonces, democratizar es entregarle poder a la ciudadanía, no a los políticos, no a las mafias, obviamente. Eso se podrá hacer, eso es una lucha. Implica conciencia ciudadana, implica maduración de la ciudadanía, implica que al haber más recursos y los problemas al tener más soluciones en lo local que en lo nacional, el presidente de Colombia va a ser mucho menos importante, va a ser más importante ser elegido alcalde, porque ese alcalde va a tener más capacidad de acción sobre su territorio que el presidente. Todavía nos pasa a nosotros en Bogotá, pero así será más en el resto del país. Eso no es malo, el presidente tendrá otras funciones, el Congreso incluso, más pequeñas que las de hoy.
La Ley de competencias
Y de eso se trata la Ley de Competencias y Recursos. Lo que vemos en las cifras, y por eso criticaba las de salud, pero es igual, digamos, la evaporación del recurso público cuando se intenta territorializar regalías, 4G, salud, Fomag, etcétera. Ese tema hay que tenerle cuidado, Contralor, pero yo no vería el aumento del control por la vía de reformas funcionales de la Contraloría. Con Uribe también estaba de acuerdo en que las Contralorías Departamentales no sirven para nada. ¿Cuál es su balance hoy? De hecho, han demostrado, han paralizado, han impedido el beneficio de la sociedad. Es pura politiquería local, un puesto ahí para negociar, con concejales. Entonces, hay una falta de control.
Nosotros desde la Nación no vemos adónde van a parar los recursos. Sabemos después, ya pa' qué. La obra no se hizo, que no sé qué, que regalías. Usted habla de $6 billones, nosotros hemos encontrado más. 30% de las obras aprobadas en los procesos de regalías no existen, ni han comenzado, y eso años ha. Y no sé qué pasa con las regalías ahora también, porque tienen un sistema normativo que garantiza la corrupción.
Entonces, aquí hay un peligro. Este Gobierno, no porque lo quisiera, pasó del 22% al 30% de las transferencias. Es decir, ya es casi lo mismo. Ya en la práctica hicimos algo que es similar a pasar del 30% al 40%, que es lo que dice la Constitución. O sea, ya hay una experiencia de salto en las transferencias. ¿Por qué ocurrió? Por nuestra reforma tributaria. Se nos volvió en contra del Gobierno por una decisión de la Corte Constitucional, que yo no comparto. Tumbó la mitad de la reforma constitucional salvaguardando los intereses de petroleras y carboneras. Y entonces, por las normas, a pesar de que se redujo la reforma tributaria a la mitad, no se redujo la cantidad de dinero que había que pasar al SPG (Sistema General de Participaciones) por norma.
La norma está un poco atrasada, porque debería tener el mecanismo de estabilización. Pues si se reduce la reforma tributaria, las transferencias se reducen. Aquí no. Entonces, las normas que tenemos pueden reducir la reforma tributaria a partir de una sentencia de la Corte. Pero lo que se gira a los municipios es como si fuese la reforma tributaria original. Ahí ya crea un hueco de gasto público terrible, pero por lo negativo para la Nación, pero positivo, entre comillas, para el municipio porque pasamos del 22% al 30% en este Gobierno, por ese mecanismo normativo.
Ahora, ese gran salto, porque las transferencias son básicamente para educación, salud y agua, básicamente. Y entonces, en el Congreso de la Federación de Municipios, que estuve ahí, ahí la oposición quería fregarme, pero no pudo. Entonces, hablamos de estos temas. Y me sorprendió ver de muchos alcaldes que hablaban ahí, cuando empecé a decir, si nosotros pasamos por este mismo hecho, el presupuesto de educación de $50 billones a $70 billones, en estos dos años y pico que llevamos, de $50 billones a $70 billones, pues tiene que verse en una realidad de mejoramiento de la educación en Colombia.
O si no, ¿para qué es eso? Y nosotros tenemos una de las malas educaciones del mundo. Es un sacrificio de la sociedad colombiana premeditado por la oligarquía de Colombia. Reforma de Pastrana, Reforma de Uribe, una transitoria, darle la plata de la educación a los banqueros. Y otra permanente, que es la misma de Pastrana, pero ya no para darle el dinero a los banqueros, sino a la guerra.
Y entonces, ¿ese es un buen negocio? Aquí hay un problema de priorización. Seguridad, como decía en su momento, ¿sabe cuál es la mejor política de seguridad en Colombia y en el mundo? Que las mamás y los papás puedan criar a sus hijos.
La economía del cuidado
No aparece en el diario de la prensa, ni en los mensajes políticos. Pero el tiempo en que una madre, sobre todo en las grandes ciudades de Colombia, una madre de familia de una madre, no pueda tener por estar trabajando, por estar metida en el Transmilenio, dos horas para llegar de trabajar en el norte, llevándole los tintos a los doctores y vive en Soacha, en Bosa, etcétera, pues son dos horas. Y eso sí tiene suerte.
Y entonces, dos horas por la mañana, dos horas por la tarde, pues ¿a qué hora llegó a la casa? ¿A qué hora sale de la casa? ¿A qué horas abraza a los bebés? Y esto que yo lo puse en la consulta popular, es la principal política de seguridad que pueda tener un país. Les diré, Colombia será grande si permitimos que las mamás abracen a sus hijos. Eso le llaman más teóricamente una economía del cuidado, una sociedad del cuidado. Cuidar la vida como prioridad. Por eso no es válido lo que está pasando con el agua potable en Colombia. Otra cifra del Contralor.
Crisis del agua potable
No, sí, aumenta la cobertura acueducto, contralor. Sí, pero ¿qué agua dan? Ojo, porque si midiéramos el servicio por la calidad del agua potable, la estadística nos llega a 80, a 50 si acaso. Los colombianos no toman agua potable, excepto unas regiones privilegiadas, incluso por razones geográficas que ya empiezan a sucumbir ante la crisis climática y Bogotá no se ha dado cuenta de eso todavía.
Su problema no era racionar el agua, porque el problema era diferente. El problema es que hay que sembrar de nuevo la selva y la sabana, y si no, no habrá solución del agua, y frenar la urbanización. Pero como la urbanización es un business y los urbanizadores financian partidos políticos, pues qué difícil que es. Tienen alcaldes. Y estamos estrellándonos contra un equilibrio de la vida fundamental: el agua.
Una ciudad sin agua muere, como dice mi crítico ahora, Mendoza. Sus novelas son de eso, de antes. O sea, él logró percibir, puso otro nombre a Bogotá, pero bueno, el agua que cae de la lluvia es venenosa. Esa es la historia de él. Y entonces alguien se quiere apropiar y mata un poco de gente por el único sitio de agua sana que hay en Bogotá. Esa es la teoría de la novela.
Pues tenemos un problema similar. No hay agua. No hay agua por crisis climática y acción de la codicia, tanto en la urbanización como en el desmonte de la selva. Y no hay solución para Bogotá si no se para la urbanización y no se para la deforestación y se vuelve a sembrar la selva. Y eso significa luchar contra la codicia. Bogotá solo vive si supera la codicia.
Pero en esto del agua potable, entonces, que es uno de los temas centrales. No, hemos fracasado como nación. No es posible que coja uno la matriz de vigencia futura, a las cuales estoy obligado a honrar. 100 billones de pesos en un periodo de 20, 30 años, un esfuerzo planificador. Indudablemente, a los neoliberales no les gusta planificar, pero planificar es de los seres humanos. Y se planifica las inversiones de Colombia por varios gobiernos sin tener en cuenta los Gobiernos que siguen.
¿Y a dónde se fue la plata? ¿Priorizaron el aparato planificador del Estado, llámese como se llame? ¿Priorizó la vida humana en las vigencias futuras? ¿O priorizó los negocios de unos cuantos financiadores de campañas políticas? Y mandó $100 billones a soportar esos negocios. Y entonces tenemos mucho dinero, no más del 90% de las vigencias futuras en un orden de $100 billones de pesos destinados exclusivamente a pagar carreteras 5G y 4G. ¿Y el agua? Ni un peso, ni uno.
Los niños no se mueren es por la calidad del agua. ¿La tractomula me garantiza que el niño viva? Incluso como que mata. Entonces en la prioridad de una dirigencia nacional, política, no están los niños sino las tractomulas. O los dueños de la carretera. ¿Qué es eso? Pues con razón somos indolentes ante la muerte. Nos interesa un pito la niñez en Colombia y si no cuidamos la niñez no hay país.
Será peor la Colombia dentro de 30 años que la de hoy porque simplemente nuestros niños de hoy, nuestros bebés de hoy no los cuidamos. Y no se cuidan no porque no se quieran, aunque hay también casos de esos, sino porque no se puede. Y entonces la gran alianza entre familia y Estado se rompe. Dicen por ahí en las malas lenguas que los izquierdistas no creemos en la familia, claro que sí. La familia es la última retaguardia del ser humano. ¿A dónde se defiende uno al final? Cuando ya lo acorralan, si no es en la familia. La familia es, por tanto, tiene que tener la potencia y la capacidad de criar, de educar. Y el Estado debe estar donde más dificultades tenga la familia para hacerlo, por razones económicas, geográficas, etcétera.
Sistema General de Participaciones
Eso no existe, no están las prioridades. Eso lo pusimos en el SGP y debe quedar en la ley. Aquí es donde viene la discusión. Nosotros dijimos, como gobierno, en la discusión del Congreso, el SGP debe extenderse de lo que ya tiene, porque va a tener más recursos, al cuidado integral de la primera infancia. Esta idea la tenía también Claudia López, que no me quiere ni cinco años, me traiciona todo el tiempo. Yo ya aprendí de la vida a través de ella.
Pero la idea es esencial, la idea es esencial. La tuvimos en Bogotá Humana. Hicimos un salto. Bogotá Humana en el terreno educativo ha sido silenciada, y es clave volverlo evidente. Bogotá Humana en esos tres años hizo saltar los indicadores de las pruebas Saber de la calidad educativa de la ciudad al promedio de la Ocde, estando muy lejos de la Ocde. La sociedad debería saber cómo fue que lo hicimos.
Aprender, todos esos son donde fallamos, en donde tuvimos éxito. Pero uno de los grandes éxitos es que pudimos hacer saltar la calidad educativa de Bogotá al nivel promedio de la Ocde, es decir, de Europa. Públicos y privados, no sólo privados de alta categoría, es todo el sistema educativo.
Eso tuvo una serie de políticas, de educar profesores apoyando sus estudios, aumentar las jornadas, meter deporte, educación física y arte, arte, arte. Entonces sí se volvía revolucionario ver que las niñitas de Ciudad Bolívar salían de sus casas al colegio con un violín. El señor de la tienda decía, ¿y esto qué pasó? Y no me meto en las contradicciones de la cultura: que si el violín es bueno en Colombia o no, porque se me parece el violín rojo.
Revolución educativa
Pero que es una revolución en Colombia, que las mamás puedan cuidar a sus niños. Si quieren saber qué haría más de cambio en Colombia, proceso revolucionario de transformación, es que las mamás puedan cuidar a sus hijos y tengan tiempo para ello. Eso significa reforma laboral, sí, señores.
No creo en los azucareros del Valle del Cauca que le piden a la Gobernadora que tumbe la reforma, la consulta popular, porque se están olvidando de, uno, el etanol que venden en las gasolineras está ligado al precio internacional del petróleo, es una usura. Está ligado al costo de producción del etanol. Y el biodiesel y todo eso, por decreto se creó un privilegio para unos.
Se les liga el precio del etanol, paga toda la sociedad la riqueza de unos. ¿Con qué derecho vienen a presionar que, entonces, las mamás no puedan cuidar a sus niños en el Valle del Cauca? Si saben esos mismos azucareros que el crecimiento de la violencia de la ciudad y del Valle del Cauca, en general, está precisamente ahí, en que la crisis por el uso de la tierra, etcétera, que excluye a la gente, la lleva a niveles de explotación, de auto explotación tales, entonces, las mamás no cuidan a sus niños y sus niños sólo ven cemento y herradumbre en sus casas, tristeza, cuando salen a la acera gris, muertos. Así no crece una nación.
Entonces, este tema del agua potable, del cuidado de la infancia, que queremos que quede bien redactado en la ley, de que el municipio adquiera la competencia de, con el Estado Nacional, de financiar la educación pública superior, que hoy no la tiene. Yo la puse ahí, espero que no me la hayan quitado en los debates. Es que, si nosotros no creamos el cerebro colectivo, no tenemos nación.
La política hecha durante décadas de financiar la universidad privada, con el respecto aquí de esta universidad y del rector, no es buena, no es buena. Los datos que tenemos hasta la fecha, y eso que nos ha faltado audacia porque puse unos ministros de educación malos. Me equivoqué, estaban pensando en otras vainas.
Y el tiempo no se puede recobrar, ese es el problema. Pero bueno, ya se hará el balance. Pero, aun así, nosotros hemos creado, no como los que nuevos estudiantes que entran al primer semestre normales, sino como nuevos cupos. En el sistema de educación pública, 155 mil. Yo quería 500 mil, aún hay tiempo. 155 mil más.
Eso, educación pública y gratuita. Ah, que la universidad privada es mejor que la pública. Bueno, que compitan, pero hasta ahora la mejor universidad de Colombia es la Nacional, pública.
Tengo mi lío con la universidad nacional, porque se devolvió demasiado de élite y no se expande por el país. Y entonces tiene un, bueno, ese es un debate similar a Los Andes. Entonces es élite, una élite pública.
No le dan puesto público, pero se defiende. Entonces, la educación superior pública, si generamos 155 mil cupos, ¿cuánto gastamos? Los datos nos dan un billón y medio. Si yo hubiera hecho eso en Ser Pilo Paga, la misma plata, pero a través de los mecanismos de Ser Pilo Paga y otros programas similares, sólo hubiera creado 15 mil cupos.
Entonces, aquí los números demuestran la desgracia de una política pública hecha de manera premeditada en contra del interés general de Colombia. Porque nosotros necesitamos a nuestra juventud educada. Si la mamá puede cuidar al niño, el niño quiere el saber. Aprende a amar el saber. Busca. Se vuelve libre. A muchos les asusta que los jóvenes sean libres. Entonces los ponen de terroristas en las cárceles. Fascistas.
Pero a nosotros sí nos interesa que los jóvenes, las jóvenes sean libres. Y la libertad está en el corazón y en el cerebro, en la sensibilidad que crece con el arte y la cultura. Y en el cerebro humano, que es la joya del universo. No hay otra cosa parecida hasta donde sabemos en el universo. La inteligencia artificial no le llega ni a los tobillos. La derrota de la inteligencia artificial por la humanidad es el arte, la creación, no la rutina. En la rutina, la inteligencia artificial nos gana. Y va a sacar todos los empleos rutinarios. Y solo quedará la creación. A lo mejor será en el capitalismo o en el poscapitalismo. Ahí dejo ese punto suspensivo.
El sato en el presupuesto
Pero este tema de la educación superior es fundamental. Nuestra juventud educada y nuestra niñez cuidada. Y ahí están los nuevos, las nuevas competencias del SGP que me parece indispensable defender en la nueva ley en el Congreso. Además, digo que ya es. Ahora, si ya pasamos del 22% al 30%, pasar del 30% al 40% no es difícil. Y va más despacioso. Nosotros lo hicimos de un solo brinco. Ahí quiero, Contralor, porque la pregunta de los alcaldes era pertinente.
Si hemos saltado de $50 billones a $70 billones, los alcaldes entonces dijeron no es que el Ministerio de Educación no da las autorizaciones para las plantas de docentes. Le pedí la información y la información es que sí, y más que el crecimiento de los dineros públicos hacia la educación en los municipios. Luego ahí no hay está el problema.
Entonces lo triste sería, porque estoy en contra de todo lo que estamos diciendo aquí, que si saltamos de $50 billones a $70 billones la educación, y de $45 billones a $65 billones la salud, saltamos de $45 billones a $65 billones la salud, ¿de dónde sacan que no hay suficiencia? Pues hay un barril sin fondo ahí que se quiere mantener. Luchando en el Congreso para que se mantenga.
Entonces, si hay barriles sin fondo y nuestro esfuerzo de hacer saltar los presupuestos en materias tan claves, fundamentales y estratégicas como la salud y la educación y el agua, y eso se está yendo a otra parte, tenemos un gravísimo problema y todo lo que podamos hacer, el incremento de la descentralización puede perderse como una oportunidad histórica de Colombia.
Ahí sí que las estirpes condenadas bajo los cielos del planeta no tendrían otra oportunidad.
Auditoría a los municipios
Entonces, Contralor, a mí lo invito, hagamos con la ayuda nuestra o con lo que quieran, hay que hacer una auditoría en todos los municipios sobre ese salto presupuestal tan sustancial en que se ha destinado. Porque si saltamos de $50 billones a $70 billones en educación, y de $45 billones a $65 billones en salud, tiene que haber necesariamente mejor educación, mejor salud.
Y lo que decían los alcaldes es que no se está viendo. Por lo que pude ver ahí, algo está sucediendo y hay que poner el ojo. La labor de la Contraloría en ese esfuerzo y la nuestra también.
Bien, yo dejo acá, porque ya me expresé en varios temas. La ley, por tanto, que hoy está en manos del Gobierno, porque se está haciendo en el Ministerio del Interior y en Planeación, debe ser un foro abierto para que todas las opiniones puedan llegar ahí, las experiencias locales, etcétera, los quereres de la población en cada región, su diversidad misma. Ojalá la priorización que debe hacer el pueblo, no el político, porque si no terminamos en las 4G, sino en el agua potable.
Y está abierta, espero que para las sesiones que empiezan después del 20 de julio se presente, y ya veremos el desarrollo del debate. Es intenso, lo sé, eso dura sus meses, pero va a ser muy enriquecedor para Colombia y puede ser un gran hecho el que por fin una institucionalidad empiece a reconocer a sus mandantes, el pueblo y su diversidad.
Gracias por haberme escuchado, muy amables.
(Fin/aga)